Lo poco que sé de la vida se cuenta tomando un café, se entiende tomando una copa, y se olvida tomando dos. Entre lo poco que sé de la vida, te diré que nada vale la pena sin alguien que te haga ser incoherente. Ni flores, ni velas, ni luz de luna. Ése es el verdadero romanticismo. Alguien que llegue, te empuje a hacer cosas de las que jamás te creíste capaz y que arrase de un plumazo con tus principios, tus valores, tus "yo nunca" o tus "yo qué va".

sábado, 5 de mayo de 2012

que tengo mas deudas con su espalda de las que jamás nadie tendra con la luna






Todo eso de que ella puede llegar a ser ese puto único motivo de seguir vivo y a la mierda con la autodestrucción...

No hay comentarios:

Publicar un comentario